REDI repudia los dichos de la Ministra de Educación porteña sobre el otorgamiento de títulos secundarios a estudiantes con discapacidad intelectual

Publicado por Aisdro -

La Red por los Derechos de las Personas con Discapacidad (REDI) repudia los dichos de la Ministra de Educación porteña, Soledad Acuña

Buenos Aires, 4 de abril de 2016- La Red por los Derechos de las Personas con Discapacidad (REDI) repudia los dichos de la Ministra de Educación porteña, Soledad Acuña, quien en una entrevista publicada el pasado 31 de marzo por la Agencia Nacional de Noticias Telam expresó sobre el otorgamiento de títulos secundarios a estudiantes con discapacidad intelectual: “Nosotros no sorteamos títulos, porque esto no es una rifa”. Los dichos se dieron en el contexto del caso de Alan Rodríguez, el joven con discapacidad intelectual que inició una demanda judicial contra el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires por negarse a extenderle su título secundario, con el argumento de que el estudiante había cursado con adaptaciones curriculares.
                Respecto del caso de Alan, la funcionaria también realizó declaraciones repudiables. En referencia a la iniciativa de la familia del joven y de diversas organizaciones sociales de promover la junta de firmas mediante una plataforma virtual para convencer a las autoridades, la Ministra opinó: “Hubo un mal manejo de la información pública, y es tanta la especulación política que mucha gente de buena fé firmó una petición para que le demos el título de Bachiller a Alan”.
                Es importante remarcar que en este caso, si bien el estudiante había recibido adaptaciones curriculares durante su cursada en una escuela secundaria común de la ciudad, durante los cinco años de escolaridad los docentes y las autoridades del establecimiento dieron por aprobadas todas las materias. Sin embargo, las notas de Alan no fueron volcadas al libro institucional de la escuela, aunque sí constan en todos los boletines entregados al alumno. Por eso, resulta inadmisible pensar que el otorgamiento del correspondiente título secundario a Alan Rodríguez, quien cursó todas las materias y las aprobó, se trataría de una “rifa”.
                Estas palabras desconocen la existencia de la Convención Internacional sobre los Derechos de las personas con Discapacidad, elaborada por la Organización de Naciones Unidas, y con rango constitucional en la Argentina. El tratado establece en su artículo 24 el derecho de todas las personas con discapacidad a una educación inclusiva y de calidad, con los ajustes razonables que requiera cada estudiante. Entonces, queda claro que la acreditación de estudios cursados de los alumnos y alumnas con discapacidad que aprobaron sus estudios es un derecho, no una rifa, porque los y las estudiantes merecen contar con su título correspondiente, si cumplieron con sus obligaciones e hicieron mérito para obtene resa acreditación, al igual que el resto de sus compañeros y compañeras.
                En nuestro país, la obligatoriedad de la educación secundaria exige que el Estado brinde a todos los ciudadanos y las ciudadanas las condiciones de ingreso, permanencia y egreso del sistema educativo, lo cual incluye la acreditación de los estudios cursados.
Por tales motivos, REDI exige a la ministra que se retracte de sus dichos y se abstenga de hacer nuevas declaraciones sobre el tema, hasta tanto se expida la Justicia en el caso de Alan.
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